Visita a un fogar: monta unha festa improvisada no xardín

Trata tu espacio exterior como si fuera cualquier otra estancia. ¡La comodidad es lo primero! Textiles, luces y accesorios de ocio harán que el espacio sea más acogedor, y se pueden colocar tanto dentro como fuera. Planifica también la transición del día a la noche: cuelga un dosel para proteger a los invitados del sol y pon mantas a mano para que puedan echárselas por encima cuando empiece a refrescar.

Platos pequeños de estilo tapa, tentempiés y bocaditos en cuencos. ¡No te compliques la vida cocinando! Inspírate en la tendencia de servir comida en tablas de cortar. Es rústico e informal, y sin apenas esfuerzo, la comida se convierte en una fiesta para los ojos y el estómago. Solo tienes que poner una pila de vajilla, cubiertos y vasos a mano. Prueba a mezclar fruta variada que puedes servir en un tarro grande con tapa, como FÖRFRISKNING, para que los invitados puedan servirse ellos mismos.

Cuando quedamos con Marion y Frédérick en su casa del campo en el norte de Francia, su manera de montar una fiesta con los amigos fue toda una inspiración. Pruébalo: prepara el espacio, colócalo todo en su sitio, relájate, únete y disfruta... ¡También es tu fiesta!