Recibe a tempada de vodas con estilo


La pérgola de la boda es el escenario de recuerdos para toda la vida. En este caso, hemos hecho una con suaves tejidos blancos y azules. Cuando haya concluido la ceremonia, los invitados podrán utilizarla como estudio fotográfico. Las ramas de eucalipto (en una cesta de ratán) no solo aportan un hermoso tono verde azulado, sino que sus hojas también son el sustituto perfecto para el arroz a la hora de recibir a los recién casados.
Una gran expresión es aún mejor si resulta práctica. Envuelve sillas plegables con tela a juego con los colores de la temática (y con motivos románticos, claramente). Cuando se acabe el festín, podrás quitar las mesas y los asientos en un pispás y así hacer sitio para que los invitados puedan darlo todo bailando.
Puede que se acerque el fin de la fiesta, pero aún no es tarde para dar buena impresión. Las ideas originales suelen tener más éxito que algo recién comprado. Piensa qué puedes hacer con cosas que ya tengas, como convertir una cómoda en una mesa de postres diferente, con dulces dentro de vasos y platos (usa adhesivo para conseguir más estabilidad).
Decoración: Elin Stierna
Fotografía: Fredrik Sweger
Texto: Henrik Annemark