Percorrido por unha casa: o primeiro piso familiar

El salón de una casa familiar es un espacio que engloba muchísimos tipos de actividades, así que lo mejor es crear un espacio lo más flexible posible. Estos son algunos sencillos tips para sacarle el máximo partido a un salón familiar:

Un sofá amplio o dos sofás de tres plazas, donde quepa toda la familia cómodamente.
¿Qué tal un sofá con chaiselongue de almacenaje para los juguetes de los niños?
Mejor mesas auxiliares en lugar de una mesa de café: así liberamos espacio para que los bebés y los niños más pequeños puedan jugar en el suelo. Además, se pueden mover cómodamente.
Alfombras que amortigüen el ruido de los juguetes al caer y hagan más confortables y cálidos los espacios.
Varios puntos de luz indirecta / ambiental para ver películas en familia.
¡Por favor, no olvidéis las mantitas para los meses de frío!

En este piso familiar se ha optado por una mesa de comedor que también forma parte del salón, creando un ambiente amplio y distendido en el que toda la familia puede sentarse alrededor de la mesa. Por supuesto, las mesas extensibles pueden ser una idea fantástica a la hora de ganar espacio extra cuando lo necesitemos.

¿Tienes una chimenea que no usas nunca pero te da pena quitarla del salón? ¿En el piso nuevo hay chimenea y no sabes si quitarla o dejarla como está? ¡Piensa que puede convertirse en la mejor aliada de tu decoración!

En este caso, la chimenea es un punto focal natural y la oportunidad perfecta para experimentar con ideas originales de decoración que pueden ir cambiando constantemente: flores y plantas de temporada que se dejan ver entre la leña, fotos que van cambiando y creciendo con la familia, velas, pequeños recuerdos de viajes... ¡Dale personalidad a este espacio tan especial de tu casa!

¿Sabes que si vienes a IKEA puedes diseñar con nosotros tu cocina desde cero? Esto es maravilloso no solo porque harás exactamente la cocina que siempre has soñado, sino porque al implicarte de una forma tan personal en el proyecto, la sentirás más tuya que nunca.

Es más: os recomendamos que vengáis todos los miembros de la familia y encontréis la cocina que más vaya con vosotros. No importa si es grande o pequeña, de todas las cocinas se puede sacar un proyecto espectacular. ¿Te gusta esta en blanco y ladrillo visto? Es increíblemente moderna y con muchísimo espacio.

Simplemente colocando algunas plantas colgantes, una balda y un taburete, este pequeño lugar junto a la ventana de la cocina se convierte en un rincón de lo más coqueto para desayunar o para tomar un café a media tarde. Este tipo de espacios que de otra forma estarían desaprovechados, son maravillosos para darnos cuenta de todas las posibilidades que tenemos en casa. Y sobre todo para recordarnos que siempre debemos dedicarnos tiempo a nosotros, a nuestro bienestar, a disfrutar del hogar.

Cuando cambiamos de casa, y sobre todo si es una casa nueva que estamos diseñando desde cero, tendemos a deshacernos de todos los muebles viejos, pensando que ya no tienen cabida.

Sin embargo, puedes hacer muchísimas cosas con ellos: desde retapizarlos, pintarlos o customizarlos para darles una nueva vida, hasta colocarlos en lugares que no tenías en mente (¿qué tal crear una segunda sala de estar en la buhardilla que tienes llena de trastos?). En IKEA creemos en las segundas oportunidades...

Si trabajáis en casa de vez en cuando, si tenéis un blog personal, si os gusta pasar tiempo navegando en internet... ¿por qué no crear un rincón específicamente para esto? Coloca una pequeña mesita cerca de la ventana, acompañada de la luz directa de un flexo y una silla cómoda. ¿Qué más necesitas?

Sabemos que el típico color para el dormitorio es el blanco, pero nos preguntamos si tú también arriesgarías como han hecho en esta casa que estamos recorriendo. Este tono azul oscuro para las paredes le da un dramatismo espectacular al espacio, además de hacerlo más parecido a la habitación de un hotel: lujoso y elegante. Eso sí, es solo apto para dormitorios amplios y con mucha luz.

¡Qué importante es dar a los niños un espacio en el que se desarrollen y jueguen libremente! Bastará con una sencilla mesita con sillas que se coloque cerca de sus libros favoritos, juegos e incluso de una mullida alfombra en la que puedan sentarse o tumbarse. Con un rincón tan básico como este aprenderán a jugar solitos aunque estén en el salón.

"Antes de mudarnos aquí, alquilamos mucho", dice Marrit. "Este es el primer lugar en el que realmente hemos podido invertir para nuestro futuro juntos, para probar las cosas como queríamos". Hemos aprendido a pintar, a hacer carpintería, a lijar pisos, a derribar techos ... No siempre ha sido fácil o cómodo. ¡Pero ha sido muy divertido! "