Platos planos
Los platos son más que algo práctico para servir la comida. También ayudan a definir el estilo y dan a la mesa un toque personal. Tenemos muchas opciones para cada ocasión y para ayudarte a que la comida sea un espectáculo para los ojos, y no solo para tu paladar.
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Delicias culinarias con platos asequibles
Descubre la alegría de comer con platos asequibles sin escatimar en estilo ni en calidad. Los platos adecuados, ya sea al poner la mesa para una comida familiar o para picar algo a solas, pueden transformar por completo tu experiencia culinaria sin necesidad de gastarte una fortuna.
Cómo elegir el plato perfecto
El plato perfecto es una mezcla del tamaño, el material, la forma, el estilo y el color adecuados. Un plato estándar tiene un diámetro de entre 25 y 30 cm, perfecto para una comida equilibrada. Los materiales son muy variados, desde la porcelana, duradera y elegante, hasta el gres y el vidrio opalino, de estilo rústico. Aunque los platos redondos son la opción tradicional, los platos cuadrados o rectangulares pueden aportar un toque moderno. Los platos blancos son atemporales y versátiles, mientras que los platos de colores o estampados le dan personalidad a cualquier comida. Aunque, en definitiva, el mejor plato es aquel que te transmita alegría y que complemente tus creaciones culinarias.
El valor de los platos asequibles
Elegir platos económicos no implica renunciar al estilo ni a la calidad. En la actualidad, hay una gran variedad de diseños en el mercado, tanto minimalistas como estampados, que van con cualquier tipo de decoración del comedor y que no exigen gastarse un dineral. El encanto de los platos asequibles radica en su capacidad para realzar la experiencia culinaria. Además de hacer que la comida sea más apetecible, también son una forma rentable de darle estilo a la mesa de comedor. Asimismo, muchos están hechos de materiales duraderos, como gres o porcelana, para soportar el uso diario y los lavados frecuentes.
Mantenimiento de los platos
Para asegurarte de que los platos te duren mucho tiempo, es fundamental cuidarlos adecuadamente. La mayoría de los platos se pueden meter en el lavavajillas, pero siempre es conveniente comprobarlo antes en las instrucciones del producto. Evita usar estropajos abrasivos que puedan rayar la superficie y, si vas a apilar los platos, plantéate poner una servilleta entre ellos para evitar arañazos. Si tienes poco espacio de almacenaje, optar por platos que se puedan apilar te ayudará a ahorrar mucho espacio. Así, la cocina estará organizada y los platos se mantendrán en perfecto estado.