Cómo elegir una alfombra para el dormitorio
No hay sensación más desagradable que despertarse por la mañana con la cara roja y los ojos hinchados de tanto dormir, con un rayo de sol tenue que ilumina y da un calorcito agradable, te estiras todo lo posible y al sentarte en el borde de la cama, ¡paf! plantas los pies en el frío suelo. Ese escalofrío, con una buena alfombra de dormitorio desaparece. Pero no cualquier alfombra. Sigue leyendo.

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En el dormitorio, todo gira en torno a la cama
Y tanto que sí... Por ello es conveniente que las alfombras que escojas para tu dormitorio aporten calidez y estilo, pero también un punto funcional que ayude a que no se rompa la magia del momento.
A continuación te damos algunos consejos a tener en cuenta:
- Las alfombras de texturas suaves crean confort para el dormitorio.
- Las alfombras tupidas aportan un confort adicional, y las de piel de oveja suave son gruesas, esponjosas y tupidas por naturaleza.
- Las alfombras pequeñas de algodón y poliéster son suaves para los pies y fáciles de lavar.
- Las pieles y los cueros aportan una sensación de confort, sobre todo al salir de la cama.
- Crea un ambiente tranquilo utilizando alfombras de colores y dibujos neutros.
- Las alfombras de algodón de tejido plano en las habitaciones infantiles son una buena elección. Son fáciles de limpiar, resistentes y tienen un reverso antideslizante.