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Cómo disfrutar de la mejor temperatura durmiendo

¿Demasiado calor? ¿Demasiado frío? Encontrar la temperatura adecuada para dormir puede ser difícil, pero no temas. Estos sencillos consejos te ayudarán a regular la temperatura de tu habitación para poder descansar plácidamente. Cambia las noches en vela por dulces sueños.

Una cama MALM orientada hacia una gran ventana soleada con plantas exuberantes en el alféizar. Hay un panel perforado SKÅDIS con varios artículos junto a la cama.
Una cama MALM orientada hacia una gran ventana soleada con plantas exuberantes en el alféizar. Hay un panel perforado SKÅDIS con varios artículos junto a la cama.

Tener una temperatura estable en tu dormitorio es importante para disfrutar de un descanso de calidad. Las variaciones de la temperatura ambiente durante la noche pueden alterar tu ritmo de sueño y dificultar que duermas profundamente. Una temperatura constante favorece el proceso de sueño natural de tu organismo y un descanso más relajado.

Tu oportunidad para dormir mejor

Las cortinas opacas no solo impiden el paso de la luz; también regulan la temperatura. Al reducir el calor que irradian las ventanas, te ayudarán a mantener tu dormitorio más fresco en los meses cálidos y más calentito cuando haga frío fuera, por lo que ofrecen siempre un ambiente ideal para dormir.

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Una cómoda y una ventana con cortinas semiopacas ROSENMANDEL con un efecto jaspeado similar a la lana en beige dorado.
Un estor opaco FÖNSTERBLAD blanco a medio bajar en una ventana encima de dos cómodas VIHALS blancas con 4 cajones.
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Duerme bien de forma natural

Las almohadas de materiales naturales, como el algodón, el plumón, las plumas o la lana, no solo ofrecen un gran confort, sino también una excelente regulación de la temperatura. Estos materiales permiten absorber y liberar la humedad de manera eficaz para que puedas disfrutar de una noche seca y tranquila sin pasar demasiado calor.

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Primer plano de un colchón blanco con una pila de edredones y almohadas de color blanco encima. Pared verde y ventana con planta.
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Elige un edredón del material adecuado para dormir mejor

¿Padeces de insomnio? La clave podría estar en el material de tu edredón. Desde la calidez del plumón hasta la comodidad del poliéster: distintos materiales para las distintas formas de dormir. Sigue leyendo para encontrar tu opción ideal:

Edredones de materiales naturales

Los edredones de materiales naturales, como el plumón, las plumas o la lana, ofrecen una forma eficaz de regular la temperatura a la hora de dormir. Estos materiales se caracterizan por su transpirabilidad y absorción de la humedad, propiedades que ayudan a mantener una calidez agradable durante toda la noche. También son fáciles de cuidar y se pueden lavar en la lavadora.

Edredones de poliéster

Los edredones de poliéster con un agradable y ligero relleno de fibra, compuesto de fibras naturales como el algodón y el lyocell (una fibra renovable procedente de la madera), ofrecen confort a distintas temperaturas. Esta mezcla garantiza que el edredón sea adecuado para todas las estaciones. Además, se pueden lavar en la lavadora, por lo que es fácil mantenerlos limpios y como nuevos.

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Una persona de pie junto a una cama sosteniendo un cálido edredón FJÄLLARNIKA con relleno de plumas y plumón en tejido de algodón blanco.
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Ropa de cama natural para una calidez óptima

La elección de la ropa de cama puede afectar significativamente a la calidad del sueño, y las fibras naturales, como el algodón y el lyocell, destacan por su capacidad de regular la temperatura. Estos materiales ofrecen una solución natural para mantener el fresco en verano y el calor en invierno, lo cual mejorará tu experiencia de sueño durante todo el año.

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Primer plano de una cama con sábanas y dos almohadas mullidas de color blanco impoluto con la luz del día entrando por una ventana al fondo.
Detalle de una funda nórdica y fundas de almohada LUKTJASMIN sedosas en gris-beige terroso en una cama.
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Vista desde los pies de una cama tapizada de color beige en un dormitorio con el colchón y el sobrecolchón visibles.

Una capa personalizada que se adapta a tu forma de dormir

Un sobrecolchón es una forma eficaz de regular la temperatura a la hora de dormir. Al añadir una capa extra a tu cama, puede mejorar el confort térmico de tu colchón, ya sea manteniendo el calor para los más frioleros o permitiendo la transpirabilidad de aquellos que suelen pasar calor. Al poder regular con más precisión el entorno para dormir, se consigue un descanso más placentero e ininterrumpido durante toda la noche.

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Un compañero refrescante junto a la cama

En las noches más cálidas, tener una botella de agua con hielo en la mesilla de noche es una solución práctica. No solo sirve para hidratarte, el frío también ayuda a reducir ligeramente la temperatura del entorno. Es algo sencillo pero eficaz para mejorar el sueño.

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Cama tapizada con ropa de cama en distintos tonos de beige y una mesilla de noche suspendida con una jarra de agua y un vaso.
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