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Salpicaderos de cocina y paneles de pared

Nuestros salpicaderos y paneles de pared para la cocina son fáciles de limpiar y protegen las paredes mientras cocinas. Hay muchos materiales para elegir tu panel antisalpicaduras de cocina: vidrio, bronce, acero inoxidable y más para darle un toque de estilo. Y si quieres algo más personalizado, puedes elegir el tamaño que encaje con tu cocina.

Esta historia tiene dos versiones

¿No te decides entre el efecto terrazo o el efecto mármol? ¿Por qué no te haces con los dos y ves cuál queda mejor en tu cocina? El nuevo panel de pared LYSEKIL tiene doble cara, para que tengas las dos opciones por el precio de una. Problema resuelto. ¿Qué más? Es fácil de limpiar y cuenta con garantía de 25 años.

Ver todos los protectores contra salpicaduras laminados
Paneles de pared de doble cara LYSEKIL, con la cara de terrazo a la vista, cubriendo la pared detrás de una olla que hay sobre una placa de inducción.
Paneles de pared de doble cara LYSEKIL, con efecto mármol, en una pared detrás de un fregadero negro y un grifo DELSJÖN negro.
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Protectores contra salpicaduras que protegen, decoran y facilitan la limpieza en la cocina 

Cocinar puede ser un caos, pero en el mejor de los sentidos. Sin embargo, cuando la salsa empieza a burbujear o la batidora sale disparada sin tapa, los protectores contra salpicaduras están ahí para evitar el desastre en la cocina. Como si fueran un escudo para las paredes, protegen contra las manchas, el vapor y los derrames, a la vez que aportan personalidad a la cocina. Tanto si te gustan los estampados llamativos como si prefieres los tonos neutros y relajantes, nuestro surtido te permite dar con el estilo que mejor se adapta a tu espacio y a tu forma de cocinar. 

¿Cuál es la diferencia entre los protectores contra salpicaduras y los paneles de pared? 

Pueden parecer similares, pero cada uno tiene una función. Los protectores contra salpicaduras están pensados para las zonas más sucias de la cocina (detrás de los fogones, fregaderos o zonas de preparación), donde es más probable que se produzcan salpicaduras, manchas y chisporroteos repentinos. Los paneles de pared, incluidos los modelos fáciles de colocar en la cocina, se pueden utilizar en una zona más amplia para añadir textura, color o protección adicional a otras partes de la estancia. Ambas opciones son fáciles de limpiar, duraderas y aptas para el uso diario, pero los protectores contra salpicaduras se centran en las zonas más propensas a salpicaduras, mientras que los paneles de pared ofrecen más flexibilidad en cuanto a distribución y cobertura. 

¿Cómo puedo elegir un protector contra salpicaduras que se adapte a mi cocina? 

En primer lugar, piensa en tu rutina. Si cocinas a menudo, busca materiales resistentes al calor y fáciles de limpiar, como el vidrio, el acero inoxidable o el laminado. Piensa en qué más ocurre en el espacio. ¿Tu cocina es un oasis de tranquilidad? Un estampado llamativo o un toque de color pueden ser la chispa que necesita. ¿Ya tiene suficiente carácter? Un protector contra salpicaduras en tonos neutros puede integrarse discretamente sin dejar de cumplir su función. Y si tienes poco espacio, elegir un protector contra salpicaduras que combine con la encimera o los paneles de la pared creará un aspecto uniforme y liso para que todo parezca más grande y diáfano. 

¿Los paneles de pared para cocina son fáciles de instalar y mantener? 

Sí: ambas cosas. La mayoría de nuestros paneles de pared para cocina se han diseñado para ser fáciles de instalar. Muchos se pueden cortar a medida con herramientas convencionales y fijar con adhesivo, clips o tornillos. Son una alternativa inteligente a los azulejos, sobre todo si quieres renovar tu cocina rápidamente sin complicarte demasiado. Una vez colocados, mantenerlos es tan sencillo como pasarles un paño húmedo. No hay que limpiar las juntas ni utilizar productos de limpieza especiales: son prácticos para el día a día y ofrecen un acabado pulido.