Cabeceros de cama
Un cabecero de cama puede aportar un toque personal y distintivo a la cama e incluso a todo el dormitorio. En el surtido IKEA, hay una amplia variedad de estilos, colores y materiales para todos los gustos, como cabeceros de madera, cabeceros tapizados o cabeceros con almacenaje. Añadir un cabecero a la cama es una manera rápida y sencilla de darle un toque sofisticado a tu dormitorio.
Transforma tu dormitorio con el cabecero perfecto
Un cabecero de cama no es solo un accesorio para la cama: es un elemento que puede cambiar por completo el aspecto de tu dormitorio. Los cabeceros satisfacen distintas necesidades, desde proporcionar apoyo para la espalda hasta aportar un toque elegante, y están disponibles en diversos estilos y tamaños.
¿Cuáles son las ventajas de un cabecero de cama?
Además de enmarcar la cama, el cabecero completa la estética general de la habitación. Si te gusta leer o ver la tele en la cama, el cabecero te proporciona un respaldo cómodo. Los cabeceros de cama tapizados, en concreto, proporcionan un magnífico soporte para la espalda y el cuello, por lo que convierten el momento de irte a dormir en una experiencia más placentera.
¿En qué casos puede ser buena idea no incorporar un cabecero de cama?
Aunque son una buena solución para rellenar un espacio vacío y aportar estilo, quizás no sean la mejor opción si quieres usar la pared para otros fines, como colgar algún cuadro. Si prefieres aprovechar al máximo la pared para la decoración, optar por no incluirlo podría ser buena idea.
¿Sigue siendo popular colocar un cabecero?
¡Por supuesto! Los cabeceros siguen siendo una opción popular para muchas personas, principalmente como elemento decorativo. Pueden realzar la estética del dormitorio, incluso en espacios pequeños en los que un cabecero completo podría ser demasiado grande. Los cabeceros pequeños y dobles son especialmente adecuados para dormitorios pequeños, ya que aportan estilo sin sobrecargar la estancia.
¿Se puede comprar el cabecero de cama por separado?
Sí, es posible comprar el cabecero por separado y fijarlo a la estructura de cama que ya tengas. Solo tienes que asegurarte de escoger uno que se adapte al tamaño de tu cama (ya sea individual, doble o de tamaño king o queen) para conseguir un aspecto uniforme.
¿Quieres un cabecero de cama, de madera, tapizado o minimalista? Encuentra tu modelo
Al elegir un cabecero de cama, ten en cuenta el tamaño de la habitación y el estilo que quieras conseguir. Los cabeceros pequeños son perfectos para espacios minimalistas, mientras que los dobles ofrecen un aspecto equilibrado en dormitorios de tamaño mediano. Los cabeceros de madera aportan un toque clásico, los cabeceros de cama modernos pueden aportar un aire acorde a la estancia vistiendo la pared de la habitación, y los tapizados le dan un aire más lujoso.
Mantenimiento del cabecero de cama
Para que el cabecero siga pareciendo como nuevo, un buen mantenimiento periódico es fundamental. En el caso de los cabeceros tapizados, basta con pasarles la aspiradora con un accesorio de cepillo para eliminar el polvo y la suciedad. Si el cabecero es de madera, es buena idea barnizarlo para que no pierda brillo y evitar arañazos.