La historia de Judith
Judith es responsable del Departamento de Interiorismo en IKEA Málaga, tiene 3 hijos y ha ascendido estando embarazada. Ella forma parte del 51,4% de mujeres jefas de sección de IKEA en España.
La maternidad jamás es un freno dentro de IKEA»
Hace ya diez años que Judith comenzó su carrera en IKEA Málaga como decoradora en la Sección de Cocinas. Por aquel entonces, ya tenía dos niñas pequeñas y el sueño de seguir creciendo profesionalmente.
Un apoyo a todos los niveles
A los dos años de empezar a trabajar en IKEA, se quedó embarazada de su tercera hija teniendo varios proyectos en marcha, uno de ellos para futuros puestos de liderazgo. “Mi jefe y RRHH me apoyaron a participar sin ningún tipo de restricciones por mi embarazo”, explica. Judith no podía ser más feliz. Se sentía respaldada e increíblemente apoyada. Pudo seguir avanzando y aprendiendo.
Su baja de maternidad la mantuvo alejada de la tienda 8 meses, encargándose de su mayor proyecto las 24 horas del día: su bebé.
“Cuando volví al trabajo, tuve algunas dudas de cómo sería mi reincorporación, de cómo me adaptaría. Pero me encontré el mismo apoyo, interés y compañerismo en todos los procesos”, dice Judith.
A su vuelta le esperaban nuevos proyectos, nuevas formaciones y un consolidado crecimiento profesional hasta llegar a su puesto actual como responsable de Departamento de Interiorismo en IKEA Málaga.
“Mi maternidad jamás ha sido un freno dentro de IKEA. Siempre me he sentido apoyada y he podido elegir mis ritmos dentro de la empresa”, comenta orgullosa Judith.

En IKEA ¡sabemos lo que queremos!
Atrás quedaron los tiempos (o al menos así debería ser) en los que las mujeres elegían entre ser madres o ser profesionales. Crecimiento profesional y personal van de la mano: no se debe renunciar a ninguno de los dos aspectos.
“En IKEA, no tienes que desperdiciar energía demostrando que por ser mujer tienes que justificarte, explicar por qué haces las cosas de una manera o de otra”, explica.
Todavía hay mucho camino que recorrer en materia de igualdad, pero cada paso que damos es un mundo. Según Judith, cada vez estamos más cerca de la igualdad real.
“¡No estamos locas…sabemos lo que queremos! Y lo que no queremos es seguir hablando de la igualdad: esto tiene que ser un hecho”, dice Judith.
En igualdad se trabaja mejor.