Un remanso de paz y concentración que se integra a la perfección con el salón

El lado recubierto de ratán del escritorio FRYKSÅS proporciona la cantidad justa de intimidad, pero a su vez también sirve de conector con el resto del salón. ¿No te parece mágico? En sintonía con los otros elementos de ratán y madera clara, es un escritorio que aporta tranquilidad a toda la estancia.

En un espacio de escritorio reducido, la combinación de tareas es crucial. Por ejemplo, una lámpara con un cargador integrado o cajas apilables que te permitan organizar los accesorios por actividad. Un protector de escritorio de corcho es ideal para proteger la superficie de bambú a la vez que aporta un aspecto y una textura agradables. Cosas de ese tipo.

Cuando hablamos del espacio reducido, el carrito FRYKSÅS es el compañero perfecto del escritorio, ya que sigue la temática del ratán y ofrece ayuda siempre que se necesita.

Aunque es lo suficientemente grande como para guardar montones de cosas, el armario tiene la altura adecuada para servir como un estante para colocar flores y otros adornos. Úsalo para regocijo de todos.

Con distintos usuarios en diferentes momentos, contar con un asiento regulable junto al escritorio es una gran ventaja. La silla de trabajo FJÄLLBERGET es la candidata perfecta para esto, ya que aporta flexibilidad y confort, y presenta un estilo y líneas depuradas que se complementan perfectamente.