Cómo crear un dormitorio acogedor y relajante

Si quieres que el sueño y la relajación sean el centro de tu dormitorio, empieza por la cama. Coloca colchas, sábanas y cojines en capas, en colores que te relajen, ya sean tonos neutros calmantes o tonos más oscuros y acogedores. Usa ropa de cama sencilla y luego viste el área circundante con obras de arte, texturas suaves e iluminación suave. Las soluciones de almacenaje pequeñas son prácticas para tener a mano lo básico y tener ordenada el área donde duermes.

Toma el control de lo que ves desde tu cama y crea algo que disfrutes mirando nada más despertarte y mientras te acomodas para dormir. Coloca las baldas en la pared opuesta y ten a la vista una selección de objetos que evoquen recuerdos, te relajen o te inspiren. Es la forma más flexible de tener expuestas tus cosas, ya quieras una vista nueva, cambiar los elementos de sitio o añadir nuevos objetos.

«Confort es crear un espacio donde no tengas que preocuparte por otras cosas», afirma Jurij, que vive en este almacén reconvertido con su compañera Konstancja. «Solo tienes que diseñar algo que te funcione y que sea sencillo de mantener. Hemos aprendido que algunas cosas son muy sencillas y que no tienen por qué ser igual que las de los demás. Y ahí es precisamente donde encontramos el confort».