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Un comedor tradicional para reuniones de todos los tamaños

Este espacio de comedor diseñado cuidadosamente convierte la hora de la comida en un momento de calma y conexión. Sus acabados cálidos y el diseño acogedor te invitan a cualquier plan, desde un desayuno rápido hasta una cena familiar que se alarga. Al situarse cerca de la cocina, se convierte en un espacio práctico que facilita el flujo de la vida diaria de toda la familia, desde las comidas hasta conversaciones y, ocasionalmente, algo de trabajo.

Una mesa extensible NÄSINGE en marrón oscuro con sillas en una zona de comedor luminosa con ventanas grandes y plantas decorativas.

Una cocina que promueve la fluidez

Esta isla de cocina fomenta una transición natural entre cocinar y comer, ya que ofrece espacio para preparar la comida, emplatarla o simplemente colocar una bandeja antes de servirla. Al tenerlo todo al alcance, facilita el flujo entre las dos zonas a la vez que garantiza que nada estropee una mesa bien decorada ni el tiempo de calidad en torno a ella.

Los materiales naturales como la madera y la cerámica aportan calidez, que contrasta con los tonos oscuros de la vajilla y los textiles suaves. El resultado es un comedor que siempre está listo, ya sea para picar algo rápido, una cena sin prisas o un juego improvisado con el que se decida quién va a lavar los platos.

Un comedor moderno con una mesa y sillas NÄSINGE en marrón oscuro, y plantas decorativas.

Un cuenco para servir GLADELIG en beige verdoso con una ensalada recién hecha, copas y una mesa puesta en un comedor luminoso.
Un plato hondo GLADELIG en gris oscuro junto a un vaso de agua, cubiertos y flores sobre un mantel estampado.

Confort que facilita los momentos en compañía (y a solas, aún más)

Elegir bien una silla marca la diferencia en una mesa de comedor. La silla NÄSINGE combina los listones del respaldo con el asiento acolchado para ofrecer el equilibrio perfecto entre sujeción y suavidad. Así, nadie saldrá corriendo en mitad de una conversación porque la silla es incómoda.

El diseño atemporal se combina con el encanto tradicional de forma ligera y etérea, por lo que es fácil mezclar varios estilos. Es ideal para reuniones, cenas distendidas o esa pausa tan necesaria para el café cuando tu hogar por fin está en calma.

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Una silla NÄSINGE en marrón oscuro con un cojín beige claro junto a una mesa de comedor en una habitación espaciosa y luminosa.
Una taza GLADELIG en beige verdoso en una mesa, junto a un periódico y vasos, con un jarrón con una planta de fondo.
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Equilibrio perfecto entre los tonos claros y oscuros

El contraste aporta profundidad a cualquier espacio, y eso es justo lo que encontramos en este comedor. La entrada de luz desde las grandes ventanas lo convierte en un espacio luminoso y aireado, mientras que los muebles oscuros añaden dimensión y definición. El armario, colocado cuidadosamente en la esquina, actúa de nexo y ofrece tanto espacio de almacenaje como un punto de anclaje visual que completa el espacio.

Usar varias alfombras superpuestas no es solo una cuestión estética: añaden textura, calidez y un toque de personalidad. Una alfombra de yute resistente prepara el terreno (literalmente) y aporta durabilidad y un encanto natural, mientras que las alfombras de tejidos más suaves dan un toque acogedor. La combinación de tonos neutros y azules oscuros ayuda a definir la zona de comedor y demuestra que las alfombras, como las tartas, a veces se disfrutan más por capas.

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Una alfombra beige con una superficie en relieve sobre una alfombra blanca y otra azul en un suelo de madera.
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Una silla NÄSINGE en marrón oscuro con cojines en beige claro junto a una ventana con luz natural en un comedor luminoso con muchas plantas.
Una lámpara de mesa AKTERSPRING de ópalo blanco que ilumina un interior acogedor junto a una maceta y un jarrón decorativo.

Un espacio de comedor que crece para la ocasión

Algunos días, desayunas a solas con total tranquilidad. Otros, la casa está llena y todos hablan a la vez. La mesa extensible NÄSINGE está preparada para las dos situaciones: reduce su tamaño cuando no hay mucho espacio y se expande cuando "solo hace falta una silla más". Su diseño clásico aúna tradición y flexibilidad, demostrando que lo práctico no está reñido con el estilo.

Desde arriba, la lámpara colgante AKTERSPRING ofrece la luminosidad exacta, elegante sin ser pretenciosa. Con sus detalles de latón que captan la luz, incluso una simple cena entre semana se convierte de repente en una gran ocasión (o, al menos, en una razón para usar servilletas bonitas).

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Una mesa extensible NÄSINGE en marrón oscuro en una zona de comedor luminosa con sillas blancas, flores y una lámpara colgante.
Un comedor moderno con una mesa y sillas NÄSINGE en marrón oscuro, y plantas decorativas.
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