Cómo diseñar una cama acogedora y hacer tus sueños realidad

Asumámoslo: hay muchas personas que se quejan sobre su descanso, pero suelen conformarse porque consideran que es algo difícil de cambiar. Bien, nosotros no creemos en "lo difícil". A veces, una almohada nueva es lo único que necesitas para mejorar notablemente la calidad de tu descanso. La idea general de una cama acogedora puede desglosarse en diversos componentes y, a veces, cambiar solo uno de ellos hará tus sueños realidad.

• Capas: la forma más inteligente de diseñar una cama.
• Sábanas: son el componente más cercano a tu piel.
• Edredones: y las diferentes temperaturas que ofrecen.
• Almohadas: hay una para cada forma de dormir.
• Colchones: la base de un buen descanso.
• Sobrecolchones: regulan la temperatura y prolongan la duración del colchón.
• Ambiente: ¿qué ocurre a tu alrededor?

Cada material ofrece distintas calidades y funciones, como la transpirabilidad, la duración y la estructura. Pero no debes preocuparte: no hace falta que te conviertas en experto en el tema, de eso se ocupan nuestros expertos. Han desarrollado un amplio surtido de ropa de cama, así que seguro que encuentras una que se ajuste a tus preferencias. Elige desde algodón natural, satén o lino, todas con densidades y ventajas distintas. Lo único que tienes que hacer es decidir la calidad que quieres más cerca de tu piel y escoger tu color favorito.

Al igual que un buen sándwich, una cama debe estar hecha de capas. Nos gusta llamarlo el sándwich del descanso. Como cada capa de tu cama se verá afectada por el resto, es la combinación lo que parecerá mágico. Si sientes que tu cama no tiene ese toque mágico, puede que debas cambiar o añadir solo una parte. ¿Será el sobrecolchón? La capa añadida no solo prolonga la duración del colchón que se encuentra debajo, sino que también ayuda a personalizar tanto el confort como la temperatura de la cama.