Nuestra historia
Actualmente IKEA llega a millones de corazones y hogares de todo el mundo, pero toda historia de éxito tiene que empezar en algún lugar.
¿Sabías que IKEA alguna vez fue un pequeño negocio en Älmhult, un pequeño pueblo sueco, que vendía a través de un catálogo de venta por correo? ¿Y que la sede central de IKEA para el diseño sigue estando allí?
Esta es nuestra historia.
Nuestras raíces suecas
Ingvar Kamprad fundó IKEA en 1943 a los 17 años, vendiendo productos como billeteras y marcos de fotos. Småland, la región sueca donde creció Ingvar, era pedregosa y escarpada. En aquel entonces, muchos de los habitantes tenían que arreglárselas con pocos recursos, haciendo todo lo posible con casi nada.
Por eso se dice que los habitantes de Småland son ahorrativos e innovadores, con un enfoque práctico para la solución de los problemas cotidianos. Esta herencia es la inspiración para la forma en que hacemos la cosas en IKEA.
¿Sabías que IKEA recibe su nombre por las iniciales de su fundador, la granja en la que se crió y el pueblo más cercano a ésta? Ingvar Kamprad Elmtaryd Agunnaryd.
La primera sala de exposición de IKEA
Los precios en el primer catálogo de IKEA eran tan bajos que al principio la gente se mostró escéptica sobre la calidad de los productos. Así, Ingvar (nuestro fundador) decidió convertir un antiguo taller en Älmhult en una sala de exposición donde la gente pudiera mirar y probar los productos antes de hacer el pedido.
¡Nos encantan los desafíos!
A lo largo de la historia nuestras mejores ideas han surgido de grandes desafíos, y creemos que esto es lo que nos hace diferentes.
Actualmente somos una de las marcas de muebles para el hogar más conocidas del mundo, y alrededor de un millón de personas trabajan con nosotros para hacer realidad nuestra visión de crear un mejor día a día para la mayoría de las personas. Y esto es sólo el comienzo.