Cómo guardar la ropa de invierno en el cambio de estaciones

Aprovecha el espacio en el clóset

Para muchos de nosotros, el clóset es uno de los pocos espacios de almacenaje disponibles, por eso es súper importante usarlo de forma eficaz.

El espacio superior, por ejemplo, es una de esas zonas que vale la pena aprovechar, ya que te puede ofrecer un montón de espacio extra de almacenaje.

Ahí puedes guardar la ropa de invierno (bien doblada, siempre) en cajas de cartón o de tela, ya que ofrecen una ventilación perfecta para las fibras naturales, como la lana.

No subestimes el espacio debajo la cama

Cuando tienes muy poco espacio de almacenaje una caja para guardar ropa debajo de la cama puede ser una excelente opción de almacenamiento. Agrega un par de cajas o cajones poco profundos (y si tienen ruedas, todavía mejor) y llénalos de ropa en bolsas de almacenaje individuales. También es un lugar perfecto para los zapatos.

Ordena la bodega

Busca entre nuestras cajas de almacenaje modelos grandes que puedas apilar y llévalas a la bodega.  Son perfectas para las zonas húmedas y, como son transparentes, podrás ver lo que hay dentro sin tener que deshacer la torre y buscar dentro.

Etiqueta las cajas que no sean transparentes, indicando su contenido.​ Siempre es bueno usar fundas de plástico para la ropa, para colgarlas si no las quieres doblar, además de que las protegen de manchas, polvo y humedad.