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Un espacio más grande permite más espacio para jugar, y en esta recámara eso significa vestirse. Una mezcla de almacenamiento abierto y cerrado crea la opción de guardar algunos artículos mientras se muestran otros. Si te encanta tu colección de ropa, ¿por qué no disfrutar de tus prendas favoritas incluso cuando no las llevas puestas?

Si sabes bien cómo es trabajar desde casa, vale la pena crear un espacio adecuado. Ubicado entre dos clósets, este escritorio en la recámara cumple con su cometido, y con un clóset justo encima, los papeles y los artículos de papelería están siempre a la mano sin ocupar espacio en el escritorio, o en la mente.

Aunque son increíblemente útiles, las piezas de almacenamiento más grandes y cerradas a veces pueden resultar demasiado agobiantes en espacios pequeños. Otras veces, ¡simplemente no caben! Elegir piezas de almacenamiento más pequeñas y abiertas, como una barra para colgar o estanterías, puede abrir incluso un poco el espacio y, al mismo tiempo, hacer que encontrar lo que buscas sea mucho más fácil.