Realizar manualidades: Usando verduras para teñir cortinas y pintar muebles de madera

El mundo natural ofrece un arcoíris de pigmentos de origen vegetal perfecto para añadir algo de color y personalidad a unas simples cortinas blancas. Este tinte púrpura completamente natural se creó cociendo a fuego lento col morada en rodajas con algunas cucharadas de sal en una olla grande de agua durante aproximadamente una hora. Siéntete libre de experimentar con otras frutas o verduras de colores, o incluso con cosas como el té y la cúrcuma. Una vez que hayas terminado, apaga el fuego, cuela el líquido y devuélvelo a la olla para que se enfríe.

Una línea sólida del blanco al morado es sencilla y llamativa, pero también puedes elegir un degradado más suave y gradual. Para ello, tendrás que sumergir la tela por partes: Empezando por unos pocos centímetros en la parte inferior, y añadiendo poco a poco más tela para crear la transición de oscuro a claro.

Algo muy bueno de la madera sin tratar es que tiene un aspecto precioso tal cual, y lo seguirá teniendo por años. Y lo que es mejor, también es un gran lienzo en blanco para pinturas y tintes si quieres que tus piezas tengan un aspecto más personal. ¿Un ejemplo? Este pequeño banco, transformado en algo realmente especial con la ayuda de una humilde papa.

Puedes pintar este banco de un color completamente nuevo o crear tu propio patrón geométrico, como estos triángulos. Empieza por tomar una papa y cortarla a la mitad con un cuchillo, antes de tallar la forma que quieras (esta parte es mejor dejarla para los adultos). Consejo profesional: Utiliza una plantilla de papel o un cortador de galletas como guía para que el contorno sea lo más perfecto posible.