Cómo conseguirlo
Los principales ingredientes de nuestro puré de patata son las patatas (82%) y la leche. Además, los trocitos de patata le dan un delicioso aire tradicional.
Detalles del producto
Listo en pocos minutos: caliéntalo en una cacerola. Si quieres que quede más cremoso, añade agua o leche.
Las albóndigas con puré de patata, salsa de nata y mermelada de arándanos rojos son el plato preferido de los suecos.
Sigue las instrucciones de preparación y gratínalo en el horno. Ideal para acompañar pescado.
Dale a tu puré un toque especial añadiendo verduras o especias a la receta.
Medidas
- Peso neto: 600 g
Opiniones
Reseñas de los clientes
Albóndigas para todos
Las albóndigas de IKEA son una muestra de la cultura sueca. Pero no todas las personas comen carne. Así que hemos hablado con personas de Asia, Europa y Norteamérica. ¿Qué sabores les gustan y qué tipo de opciones culinarias prefieren? Luego creamos una albóndiga de proteína vegetal. Pero esto no era suficiente para atraer al mayor número posible de personas. Así que creamos también una albóndiga de pollo. Todas las variedades, junto con los acompañamientos esenciales de salsa cremosa y puré de patatas, constituyen la serie ALLEMANSRÄTTEN.
Annika Dunnico ha ayudado a desarrollar los productos. "Si eres flexitariano, vegano, tienes ciertas necesidades dietéticas por tus creencias culturales o simplemente quieres elegir lo que te gusta. Poder disfrutar de esta comida tradicional de IKEA es un derecho de todas las personas, independientemente de quién seas", afirma Annika. Además de su opción favorita, la clásica albóndiga de carne de cerdo y ternera, es una gran fan de una albóndiga en particular. "Creo que la albóndiga vegetariana es absolutamente fantástica. Se pueden hacer muchas cosas diferentes", dice, explicando que fue creada para adaptarse bien a diferentes culturas culinarias, como el curry o la barbacoa.
Opciones más sostenibles
La sostenibilidad era una de las principales razones por las que Annika y su equipo desarrollaron nuevas opciones. La producción de carne contribuye al cambio climático y una forma de combatirlo es con nuestras opciones alimentarias. Comer comidas vegetarianas más a menudo puede tener un impacto positivo en nuestro medio ambiente. La albóndiga de pollo tiene una huella de carbono más de cinco veces menor que la clásica albóndiga de carne. Y la albóndiga vegetariana es aún más respetuosa con el clima, con una huella de carbono 30 veces menor. Las albóndigas de pollo y las vegetarianas son también más bajas en grasa y calorías, lo que las convierte en opciones más saludables también. "Aunque no seas vegano o vegetariano, te pueden interesar estas opciones", dice Annika. "Las personas buscan algo que les resulte atractivo. Somos famosos en todo el mundo por nuestras albóndigas y las hemos adaptado para que todas las personas puedan disfrutarlas".