Visita a un hogar: crea un dormitorio infantil perfecto

Elige un almacenaje que permita a los niños mostrar sus cosas favoritas. Las baldas abiertas y los estantes para cuadros son perfectos para los amantes de historias, y una forma sencilla de cambiar el look de su habitación eligiendo lo que desean mostrar. Crea un acogedor espacio para la lectura para los pequeños ratones de biblioteca añadiendo un cojín grande o un colchón y cojines junto a las baldas.

Usa el color para que lo que te rodea sea vibrante. Los textiles y las imágenes son una forma fácil de inyectar energía positiva en una habitación blanca, además de que son fáciles de actualizar a medida que los niños crecen y cambian sus gustos. Elige también una cama que crezca con tu hijo. Además, piensa en añadir toques divertidos e imaginativos en la zona de dormir, por ejemplo, pintando un juego de rayuela en el suelo con cinta aislante.

Usa un escritorio para ayudar a crear el espacio y fomentar la colaboración. Al colocar el escritorio de Hania lejos de la pared en vez de pegado a ella, se separa el espacio de lectura del de dormir. Esto también permite colocar una silla en cualquier lado para que una amiga o padre se pueda unir en la mesa.

«Paso mucho tiempo en mi habitación», comenta Hania. «Me encanta leer y acariciar a mis gatos Kiki y Nina. ¿Mis colores favoritos? Es una pregunta fácil. Violeta y verde menta».