Cunas para bebés
Ser madres y padres por vez primera es maravilloso... e intimidante. Por eso garantizamos que nuestras cunas cumplen normas de seguridad estrictas, tienen bordes redondeados, están fabricadas con materiales inofensivos y pueden ajustarse al crecimiento de tu bebé. Si todavía no tienes todo, complementa tu cuna con un colchón, ropa de cuna, y un mudador.
Las cunas para bebés son su primer espacio seguro
Elegir la cuna para bebés adecuada es una decisión crucial para los padres. Una cuna es la piedra angular del entorno de sueño de tu bebé, ya que le proporciona un espacio seguro y cómodo para descansar y crecer.
Las cunas para bebés IKEA te ayudan a evitar caídas
Las cunas están diseñadas para proporcionar un entorno de sueño seguro y cómodo a los bebés desde que nacen hasta que están preparados para pasar a una cama más grande. Una cuna para bebé es una cama pequeña diseñada específicamente para bebés y niños pequeños. Sus laterales altos están hechos para evitar caídas y suelen ser de madera o metal.
¿Cuál es la dimensión de una cuna para bebés?
Una cuna estándar suele medir unos 70 cm de ancho y 140 cm de largo. Este tamaño ofrece espacio suficiente para un niño en edad de crecimiento y, al mismo tiempo, cabe cómodamente en la mayoría de las guarderías. Algunas cunas para bebés están diseñadas con características convertibles que permiten utilizarlas posteriormente como cama para niños pequeños, ampliando así su utilidad a medida que el niño crece.
¿Son seguras las cunas para los recién nacidos?
Sí, las cunas se consideran uno de los lugares más seguros para que duerman los recién nacidos cuando se utilizan correctamente. Busca cunas que cumplan las normas de seguridad vigentes. Cuando montes la cuna de tu bebé, asegúrate de que el colchón quede bien ajustado y sin huecos en los bordes. Mantén la cuna libre de juguetes, almohadas o ropa de cama suelta que puedan suponer un riesgo de asfixia.