Zonas individuales: Cómo crear recámaras privadas en un loft

Como las noches son fácilmente la parte más tranquila de sus ajetreados días, los padres han preparado su recámara para relajarse y dormir lo mejor posible con textiles suaves, una iluminación aún más suave y persianas de bloqueo. Para mayor privacidad, cierran una cortina divisoria a lo ancho de su departamento, separando su espacio del resto de la casa. Ah, por fin algo de paz.

Un generoso clóset para dos ofrece una mezcla de compartimentos abiertos y cerrados. El almacenamiento en la parte superior está lleno de decoraciones y otros suministros de temporada, para aprovechar al máximo la altura de la habitación y un lugar conveniente para las cosas que solo necesitan ocasionalmente.

Para un par de adolescentes que comparten un espacio, hay una regla que ambos siguen (normalmente): Lo mío es mío y lo tuyo es tuyo. Dos clósets contiguos le dan a cada uno su propio espacio para guardar su ropa y objetos personales, pero el verdadero artífice de la intimidad es la cortina divisoria de doble capa entre sus camas.

Con edades cercanas, pero con intereses muy diferentes, estos dos hermanos han hecho suyas las mitades del espacio que comparten. Para el mayor de los dos, eso significa juegos y todo lo relacionado con internet.

El hermano pequeño, más feliz en la naturaleza o entre las páginas de un nuevo libro, ha hecho de su zona todo lo que más le gusta. El escritorio que se encuentra debajo de su cama alta es su lugar para contar historias sin ser molestado, mientras que los estantes de diferentes formas y tamaños albergan su colección de novelas y equipos para exteriores.